Chile serrano o jalapeño que se aplasta suavemente con las manos y se rueda con la palma, para que las semillas y venas del interior liberen el picor que contienen y resulte más picoso. Un chile toreado puede comerse crudo; en casa muchas personas acostumbran tener su chile toreado al lado del plato y comerlo a mordidas, alternadamente con sus alimentos.
En el ámbito restaurantero son chiles asados en la plancha con un poco de aceite hasta que se ampollan y servidos solos o con cebollas preparadas de la misma forma. Se les pone sal y jugo de limón. En los restaurantes de comida asiática, ya sea japonesa o china, a veces se sirven los chiles toreados de forma similar a los mencionados, pero se les añaden gotas de salsa de soya para darles un toque asiático.
Fuente: Larousse Cocina
Estos chiles verdes toreados son el acompañamiento perfecto para una carne asada, unas carnitas michoacanas, unos ricos tacos o incluso unos frijoles fritos, es decir, combinan con todo!!
Foto de portada: Juan de Dios Garza Vela, mexicanfoodporn en Instagram
Texto: Chiles Toreados / Larousse Cocina.